PERIODISMO RADIOFÓNICO Y ALGUNAS REFLEXIONES PARA SU DISTINCIÓN
Autor: María M. Santisteban tejada
Universidad Nacional Pedro Ruiz
Gallo – Lambayeque, Perú
RESUMEN: El lenguaje de radiodifusión no es
únicamente la palabra, pues se constituye de los sistemas expresivos de la
palabra, la música y los efectos sonoros, sin embargo es conveniente analizar
la organización de los contenidos específicos de la emisión radiofónica, ya que
información, no es solo aquella que nos proveen los noticieros, o lo que se difunde
a través de los medios, sino todo aquello que nos rodea y percibimos a través
de los sentidos.
Asimismo analizar, y revisar o aclarar términos acerca de los conceptos específicos sobre géneros, programas y formatos radiofónicos, según reconocidos autores, de la mima manera conocer la
invención del periodismo radiofónico, según Edwards R. Morrow.
PALABRAS
CLAVES: periodismo radiofónico/ Edwards R. Morrow. género / formato/ rescata la radio/ impacto en
noticia
La
noción de Transmitir Información sobre un
mensaje, implica relación con la actividad en acción,
entonces, la transmisión no se limita a un exclusivo tipo de
traspaso, sino, que puede darse de muchas maneras, ya sea una información o una noticia.
Esta transmisión puede darse vía medios de comunicación, como en programas de
radio, o de TV.
El periodista radiofónico debe reunir
las exigencias de criterio e intuición, debe saber buscar, seleccionar, valorar
y elaborar información. Edwards R. Morrow, fue el periodista que más estableció
los estándares periodísticos de calidad, primero en la radio luego en la
televisión, pues dotó un lenguaje y estilo propio, alejado de la prensa, creando
así un equipo llamado “The Morrow Boys”, que más adelante se conocería como una
verdadera escuela del periodismo.
Transmitir rigurosamente en directo,
es una forma de comunicación
social que permite dar a conocer y analizar los hechos de interés
público a través de las ondas. En tanto, el periodismo de radio exige
que la información sea difundida de manera clara y concisa. Para ello, es
necesario que el texto esté bien organizado y que facilite una lectura sin
tropiezos y fácil de expresar en voz alta. Además el periodista radiofónico debe tener unas
condiciones básicas para traducir la voz a sonidos y hechos informativos.
Según se sabe en las primeras décadas, las noticias de radio se hacían desde el estudio y, por ello dependían en gran medida de los periódicos y los servicios de agencias, precisamente Edwards R. Morrow, sale de esa rutina a la calle subiendo a los tejados y pone el micro donde puede, es así como la noticia actual la pone en antena, para lo cual, tiene que dotarse de elementos de creatividad para integrar en un solo acto comunicativo, todos los elementos expresivos de la técnica radiofónica, proporcionan la oralidad, la reducción de lo esencial a lo preciso, el sentido emotivo y el personal que la radio requiere.
Pues bien hasta
hace muchos años en el ambiente de la radio era común referirse a los mensajes
concretos como formatos, muchos autores y actoras de la radiodifusión
internacional han intentado resolver la pregunta que muchos estudiantes y
profesionales nos hacemos, ¿es lo mismo formato, genero y programa?, para
algunos autores estos conceptos los consideran sinónimos, sin embargo otros
opinan que no lo son. A finales de de la década de los 70’ Mario Kaplùn,
definía al formato como la estructura radiofónica más adecuada para transmitir los contenidos. No obstante más adelante en su texto clásico, Producción de
Programas de Radio (1999,154), recomendaba:Según se sabe en las primeras décadas, las noticias de radio se hacían desde el estudio y, por ello dependían en gran medida de los periódicos y los servicios de agencias, precisamente Edwards R. Morrow, sale de esa rutina a la calle subiendo a los tejados y pone el micro donde puede, es así como la noticia actual la pone en antena, para lo cual, tiene que dotarse de elementos de creatividad para integrar en un solo acto comunicativo, todos los elementos expresivos de la técnica radiofónica, proporcionan la oralidad, la reducción de lo esencial a lo preciso, el sentido emotivo y el personal que la radio requiere.
“necesitamos conocer y dominar
bien los distintos géneros o formatos radiofónicos dentro de los cuales debemos
elegir el más funcional para nuestro proyecto”
Años después,
José Ignacio López Vigìl ofreció otra idea:
“¿Qué sugieren estas dos palabras, género y
formato?, La primera tiene una raíz griega que significa generación, origen.
Digamos que son las primeras distribuciones del material radiofónico, las
características generales de un programa. La segunda viene de un vocablo latino
forma, son las figuras los contornos, las estructuras en las que se vierten los
contenidos imprecisos. (…) los géneros entonces, son los modelos abstractos,
los formatos, los moldes concretos de realización. En realidad, casi todos los
formatos podrían servir para casi todos los géneros”
Con estas
bases podemos concluir que cada formato es un programa radial. Los programas que estén
presentes en un determinado género comparten cualidades y características
comunes que los hacen diferentes a otros pertenecientes a otro género. Los
formatos también se estructuran o definen como estilos de programación y su
base es según las expectativas del público,
por otro lado el
programa es una forma intermedia entre el género y el formato, que consiste en
una estructura básica de comunicación, que contiene uno o más géneros. Por lo
consiguiente, en la radio, los géneros pueden dividirse en cuatro grandes grupos:
Informativos, Interpretativos y de opinión, así como también, la programación radiofónica se planifica y organiza en los siguientes niveles, de menor a mayor:
• Géneros (formas específicas para organizar los contenidos),
• Programas (formas o estructuras intermedias, constituidas por uno o más géneros), y
• Formatos (formas generales para organizar el conjunto de programas y géneros de una emisora).
Digamos entonces que los géneros radiofónicos responden a las
características “generales” de un programa. Los formatos son, como su
nombre lo indica, la forma que se le da a cada programa, y por ello son muy flexibles entre si. Es así como podemos encontrar formatos que contienen otros formatos, que
se fusionan o se mezclan dando origen a otros productos radiofónicos, pero los
formatos casi siempre se inscriben dentro de un género en particular, así es
como la mayoría de las personas distingue una entrevista de una noticia, un
anuncio de una radionovela, y un documental de un comentario, aunque en
ocasiones les parezca difícil distinguir
entre realidad y ficción.
Entonces la radio es un medio está ubicado
dentro de los medios de comunicación audiovisual donde algunos de sus objetivos
es: formar, desinformar y entretener, ya que si se está ubicado en la playa, la
montaña, en las casas, automóviles, cocinas, empresas, y hasta
en las alcobas. La radio informa y hace compañía, educa; por lo que su alcance es prácticamente
ilimitado.
Como se sabe, la
radio es el único medio de comunicación que llega a los lugares más recónditos
de las comunidades y explaya la imaginación, lo cual hace que se convierta en un
medio auxiliar y eficaz dentro de una campaña publicitaria o medio principal para determinados programas
informativos. Sus características técnicas la
presentan como un canal personal, íntimo y extraordinariamente intrusivo,
entonces la radiodifusión rescata la tradición oral de la humanidad; en tanto
esto significa que el medio recrea o produce actos de habla , situaciones
comunicativas que reúne las características propias de la oralidad, así como rasgos
de la comunicación escrita, pues bien estas comunicaciones orales son
convencionales, como también reconocibles por la audiencia, que las acepta o
rechaza dependiendo de un factor importante, como es, su experiencia ideológica. Esta
cuenta con formatos radiofónicos pueden ser: cortos (noticiero, comentario,
charla, entrevista reportaje, mesa redonda y debate) o largos (tertulia, radio
revista, documental, retrato sonoro, documental dramatizado, drama)[1]
Por otro lado la noticia genera impacto, cuando el periodista o narrador otea el horizonte del hecho y va describiendo y narrando en directo cuales son los cambios al problema, conflicto o la pepa del asunto presentado, por vez primera, en tiempo presente y tener en cuenta que en radio, las crónicas que recojamos no son para ser leídas sino para ser contadas y por consiguiente escuchadas (Bob Edwards Morrow).
El resultado de todo eso es usar frases sencillas, alejadas de toda afectación, las cuales contengan un vocabulario comprensible para toda la audiencia, pues en la radio en oyente no puede pasar a la siguiente noticia, como si lo puede hacer en un periódico. El periodismo radiofónico es un artefacto temporal, no espacial, y como tal debe arrastrar al oyente de principio a fin de la narración, es por esta razón que en una crónica el periodista es capaz de iniciar hablando de un fuerte hecho pasado y así comprar las consecuencias con lo que se puede sentir hoy, sin duda esto llama la atención al oyente y apela a su imaginación necesaria, para así reconstruir mentalmente el escenario de hechos
Se puede
concluir que la radiodifusión tiene una responsabilidad social; el cual es
llevar información hacia su audiencia objetiva, para generar una opinión
pública que coadyuve al desarrollo social.
La noticia
radial genera impacto en el oyente cuando esta, narrada en caliente, generando
así, que su receptor desarrolla poder de
imaginación.
La empatía
con el público es indispensable por lo mismo que el periodista radiofónico debe
usar un lenguaje sencillo y básico posible.
La radio nos
aleja de la soledad, pues esta de la mano con la tecnología, nos aproxima más,
es ahí cuando se genera la una emotividad entre el locutor y la audiencia.
Esta
actualidad debe quedar patente los servicios informativos de una emisora ya que
para ello hay que tener en cuenta
aquellos recursos que remarcan dicha actualidad en radio
Enlaces
http://www.i-bejar.com/opinion/rivadeneyra/articulo.asp?id=106
[1] Adaptado de Alves, Walter O. (1984). Radio: la
mayor pantalla del mundo. Quito ecuador, CIESPAL, pp. 46-63.
audios:
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